La proclamación de Felipe VI

El pasado jueves, día 19 de junio de 2014, día del Corpus Christi, tuvo lugar un acontecimiento histórico en nuestro país. Tras la abdicación del rey Juan Carlos I la pasada semana, todo estaba dispuesto para la proclamación de nuestro nuevo rey, su hijo, Felipe VI, junto a su familia, la que a partir del jueves se convirtió en la nueva familia real: la reina Leticia (una mujer plebeya, periodista, republicana y divorciada), la princesa Leonor y la infanta Sofía.

Hizo un buen día en Madrid, no hizo mucha calor, ni tampoco frío. El primer acto que se llevó a cabo fue el traspaso de poderes del antiguo rey, Don Juan Carlos I, al nuevo, Felipe VI, haciéndole entrega del fajin rojo de Capitán General de los tres ejércitos de España (aire, tierra y mar). Se realizó en el Palacio Real a eso de las 10:30 de la mañana, en donde estaban presentes los reyes, Juan Carlos y Sofía, la entonces princesa Leticia y sus hijas, y la infanta Elena y su hijo Froilan, estos por parte de la familia real; por otra parte estaba aquello lleno de periodistas cubriendo el acontecimiento y retransmitiéndolo en directo para todos los Españoles y para el resto del mundo. No todos los días se vive algo así, y por eso he creído oportuno relatarlo aquí también.

Después del traspaso de poderes, la familia real presente en ese acto, a excepción de Don Juan Carlos, tomaron camino del Congreso de los Diputados, escoltados por la policía nacional, haciendo un recorrido por varias calles de Madrid. Al llegar, el presidente del gobierno, Mariano Rajoy, les dió la bienvenida y los acompañó hasta el interior del emiciclo. Una vez dentro, el presidente de la cámara, hizo una pequeña presentación a lo que fue el primer discurso de Felipe VI como rey de España, el cual duró unos 26 minutos aproximadamente.

El discurso, como habréis podido comprobar, aunque largo, fue conciso, no se fue por las ramas, en el que se comprometió con los ciudadanos a trabajar duro para ser un digno Jefe del Estado y representante de España y de todos los españoles, tanto dentro como fuera de nuestro país. Quiere hacer que nos sintamos orgullosos de su labor y su trabajo. Le hace el relevo generacional a su padre, y pide que ese relevo también se lleve a cabo en el resto de instituciones, porque ya va siendo hora de renovarse, de dejar que los jóvenes tomen el control y las decisiones relevantes que necesita el país.

Después de este emotivo discurso, los reyes, y el resto de la familia real, volvió a tomar camino al Palacio Real haciendo un nuevo recorrido por las calles de Madrid, esta vez con el coche descubierto y saludando a los ciudadanos que salieron a la calle para no perder detalle de lo que estaba sucediendo. Al llegar al palacio, se hizo un "besa manos" (aunque más que besa manos, fue un saludo y listo), por el que pasaron 3.000 personas, y que cuando terminó, nuestro rey hizo la broma de "¿queda alguien más?". Y por último, y para terminar la intensa jornada histórica, salieron al balcón del Palacio Real y desde ahí saludaron como nuevos reyes de España.

¡Larga vida al rey Felipe VI! ¡Viva el rey! ¡Viva España!